martes, 10 de noviembre de 2009

Mar por dentro

El mar no tiene abismos. Solo olas
que se devuelven desde su centro
hasta provocar que la tierra desaparezca.
El mar no tiene abismos porque no sabe
nada de la muerte.
Los cuerpos que flotan en la corriente son
tragados por el silencio, el frio
de los brazos vencidos, las bocas calladas.
Los peces mueren porque el mar
confunde el amor con las piedras,
los esqueletos con los arrecifes de la costa.
El mar no tiene abismos porque canta,
porque su idioma no concuerda con el idioma
del hombre.
Donde es más azul y más saladas sus aguas
se siente como un llanto
las burbujas de los seres submarinos.
Y sin embargo eso significa vida
y significa que las bestias se devoran
sus propias entrañas.
El mar no tiene abismos porque
el mar no tiene fin.
El mar es lo más parecido a un útero
deshaciéndose de sí mismo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario